Hay una razón por la que los atletas de élite, como los boxeadores, incluyen el salto a la cuerda como piedra angular de sus entrenamientos: es una forma increíblemente eficiente de quemar calorías, ponerse en forma y divertirse mucho más que subirse a una máquina de cardio durante una hora o más.
Aquí tienes algunas de las muchas razones para añadir el salto a la cuerda a tus entrenamientos:
1. Quema toneladas de calorías. Quema una tonelada de calorías.
Cuando saltas repetidamente, tu cuerpo quema de 800 a 1.000 calorías por hora -compáralo con las 200 a 300 calorías que se queman por hora al caminar.
Aún mejor, saltar la cuerda (especialmente el salto de cuerda de alta intensidad) hace que tu cuerpo sea una máquina de quemar calorías. Esto significa que cuando añades el salto de cuerda a tu rutina de entrenamiento, quemarás más calorías no sólo durante tu entrenamiento, sino durante todo el día.
2. Puedes llevarla contigo a cualquier parte.
¿Estás de viaje, o no te apetece ir al gimnasio hoy? Mete tu cuerda de saltar en la maleta y llévatela de vacaciones o siempre que quieras hacer un entrenamiento rápido en cualquier sitio.
Si tienes poco tiempo, incluso un entrenamiento de 4 minutos con la cuerda de saltar tipo tabata te ayudará a mantenerte en forma cuando estés de viaje o lejos de tu rutina de entrenamiento habitual.
3. Ayuda al equilibrio y la coordinación.
Saltar la cuerda puede ayudar a aumentar tu coordinación, lo que no sólo te ayudará a sobresalir en cualquier deporte nuevo que pruebes, sino que te mantendrá más sano y menos propenso a los accidentes más adelante en la vida.
Y aunque el equilibrio puede ayudarte a rockear en una clase de yoga ahora, también es importante mantenerlo durante toda tu vida. Según el Dr. Daniel W. Barry, profesor adjunto de medicina en la Universidad de Colorado, saltar puede ser tan importante como la fortaleza de los huesos para evitar las fracturas. Dice el Dr. Barry, en un artículo publicado en The New York Times: «Los huesos frágiles no importan, desde un punto de vista clínico, si no te caes».
4. Te ayuda a relajarte.
Cuando saltas, tu cuerpo libera endorfinas, que actúan como analgésicos y te dan una sensación de bienestar y relajación.
Además, la respiración profunda que haces mientras te ejercitas vigorosamente despeja tu mente, agudiza tu concentración y te da energía para el día que tienes por delante.
5. Es bueno para el corazón.
Febrero es el mes americano de la salud del corazón, y no hay mejor ejercicio para aumentar el ritmo cardíaco y mantener el corazón feliz que saltar a la cuerda. Saltar a la cuerda con regularidad mejora tu estado cardiovascular, la capacidad del corazón y los pulmones para suministrar oxígeno a los músculos que trabajan.
Si aún no tienes una cuerda para saltar en casa, hay algunas cosas que debes tener en cuenta a la hora de conseguir una. En primer lugar, cuanto más fina sea la cuerda de saltar, más fácil será intentar estilos de salto de cuerda centrados en la velocidad, como el doble unders.
En segundo lugar, querrá conseguir una cuerda que, cuando se doble, llegue aproximadamente a la altura del pecho. Si es más larga, es probable que te tropieces con la cuerda.
Aquí tienes algunas variaciones de la cuerda para saltar que puedes probar por tu cuenta:
Single unders: Agarra tu cuerda de saltar con ambas manos, balancéala delante de ti y luego salta sobre ella.
Rodillas altas con una cuerda de saltar: Agarra tu cuerda de saltar con ambas manos, luego lleva tu rodilla izquierda hacia tu pecho tan alto como puedas, luego inmediatamente llévala al suelo y reemplázala con tu rodilla derecha mientras balanceas la cuerda frente a ti.
Double unders: Tal y como suenan, los dobles unders requieren que consigas la cuerda bajo tus pies dos veces en un solo salto. Son una forma muy avanzada de saltar la cuerda, así que si no lo consigues a la primera, ¡no te preocupes! Concéntrate en mantenerte lo más apretado posible y en mantener los brazos a tu lado mientras mueves la cuerda, y los conseguirás con el tiempo y la práctica.