Contrariamente a la creencia popular, no es necesario tener infestaciones de ratones y cucarachas en su casa para estar expuesto a los alérgenos de ratones o cucarachas. Los principales responsables de la exposición provienen de las partículas de heces de las cucarachas y de las heces, orina, epitelio (células de la piel) y caspa de los ratones. Estos alérgenos se transmiten por el aire cuando las partículas se secan.
Se ha descubierto que los ratones y las cucarachas son componentes del polvo doméstico. Tanto los contaminantes de los ratones como los de las cucarachas pueden encontrarse en los tejidos, los alimentos, el cartón, las alfombras y muchos otros objetos y materiales que se introducen en el hogar, como la ropa de cama, la ropa y los paquetes.
Los alérgenos de las cucarachas actúan de forma similar a los alérgenos de los ácaros del polvo. Los controles ambientales deben manejarse de la misma manera, ya que un número significativo de hogares sin infestación, tienen altos niveles de alérgenos de cucarachas en el hogar. Los controles ambientales incluirían fundas a prueba de ácaros para el colchón, el somier y las fundas de almohada. Sería aconsejable tomar medidas para reducir los objetos que acumulan polvo, especialmente en el dormitorio, y pasar la aspiradora y limpiar el polvo con frecuencia. Siempre que sea posible, es preferible colocar un suelo en lugar de una alfombra. Un filtro hepa para el dormitorio y/o la(s) habitación(es) más utilizada(s) y una aspiradora con filtro hepa pueden ser compras a considerar.
También hay que considerar la exposición fuera del hogar. La exposición puede producirse en lugares de trabajo, escuelas, restaurantes y tiendas, por nombrar algunos.
También debe tenerse en cuenta la exposición relacionada con los alimentos. La FDA ha establecido un porcentaje permitido de partes del cuerpo de los insectos en algunos alimentos, especialmente en el chocolate y el café. Otros alimentos son, entre otros, la mantequilla de cacahuete, los macarrones, la fruta, el queso, las palomitas de maíz y el trigo.
Tanto los alérgenos de los ratones como los de las cucarachas se han relacionado con el desencadenamiento del asma en los casos existentes y, posiblemente, con el asma en los niños.