Skyrim:Sabjorn

Sabjorn en la barra de Honningbrew Meadery

Sabjorn es un ciudadano nórdico que vive y es propietario de Honningbrew Meadery, un competidor de reciente creación de la Black-Briar Meadery en Riften. Sabjorn tuvo el valor de rechazar una oferta de Maven Black-Briar, y como resultado, tendras que causar la caida de Sabjorn durante la quest del Gremio de Ladrones Dampened Spirits.

Antes de la quest, Sabjorn dirige su Honningbrew Meadery tranquilamente, con la ayuda de sus asistentes, Mallus Maccius y Eimar. Estara de pie detras del mostrador ofreciendo alimentos variados y su especial Honningbrew Mead desde que se despierta a las 6 de la mañana hasta que se retira a sus aposentos privados a medianoche.

Sabjorn lleva un conjunto de ropa de tabernero y un par de zapatos. Lleva una daga de acero y nada más.

Cuando te acerques a él, se mostrará servicial y amable: «Bienvenido. Soy el dueño y propietario de Honningbrew Meadery» y «Honningbrew sólo utiliza la mejor miel natural, no ese fango que encontrarás en Goldenglow Estate». También dirá: «Puede que seamos pequeños, pero lo que nos falta en tamaño lo compensamos en calidad». Por último, aprovechará para hablar mal de su competencia en Riften: «El hidromiel de Zarza Negra está muy bien, si necesitas algo para lavar la suciedad de los cascos de un caballo de montar». Sin embargo, mientras Sabjorn se muestra alegre, su ayudante Mallus Maccius se muestra excesivamente amargado por todo, diciendo: «Si quieres comprar algo, ve a buscar a Sabjorn. Si no, lárgate», «A decir verdad, Sabjorn no es un gran propietario. Conductor de esclavos, seguro» y «Nunca he conocido a alguien como él que se deleite tanto en la miseria de los demás». El otro trabajador de la hidromiel, Eimar, no ve nada malo en su empleador y comenta: «Si quieres comprar algún hidromiel, habla con el dueño, Sabjorn» y «Somos una hidromiel pequeña, pero que crece rápidamente. Sabjorn lleva poco tiempo dirigiendo este lugar y míralo».

Después de tus descubrimientos en la Finca Goldenglow se hace evidente que alguien quiere atrapar al Gremio de Ladrones, y Brynjolf está comprensiblemente desconcertado por el extraño contrato que trajiste de la caja fuerte de Aringoth. Sin embargo, también te indica que Maven Black-Briar tiene un trabajo para ti, ya que la competencia de Honningbrew Meadery supone una amenaza para sus ventas de Black-Briar Mead. Esto marca el principio del fin de Sabjorn y da comienzo a la misión «Espíritus amortiguados». Cuando te encuentres con Maven en el Bee and Barb, te explicará lo que hay que hacer: «Tengo un competidor llamado Honningbrew Meadery al que quiero sacar del negocio. También quiero saber cómo se las han arreglado para poner el local en marcha tan rápidamente». A continuación, te hablará del infeliz maestro cervecero Mallus Maccius, y de que debes reunirte con él en Whiterun. Cuando le preguntes quién dirige la fábrica de hidromiel de Honningbrew, te dirá: «Un vago llamado Sabjorn. Ha sido una espina en mi costado durante los últimos años». También explicará que Sabjorn es algo más que una sana competencia: «No pasa un día sin que me arrepienta de haber dejado a Sabjorn llegar tan lejos como lo hizo. En tan sólo unos pocos años, ha llevado esa bilis que llama hidromiel al mercado y una parte de mis beneficios con ella. No puedo imaginar de dónde sacó el oro para llevarlo al mercado tan rápidamente». A continuación, explicará cómo la caída de Sabjorn la beneficiará: «Con Sabjorn en la cárcel, su hidromiel se verá obligada a cerrar. Entonces me abalanzaré y me haré cargo del lugar. No más competencia». Por último, ella le informará por qué es sabio atacar ahora: «El trabajo de Goldenglow Estate ha interrumpido sin duda el suministro de miel que necesito para hacer mi hidromiel. Sabjorn podría utilizar esta interrupción en su beneficio y hacerse con una mayor cuota de mercado. No puedo permitirlo.»

Mallus conspira para deshacerse de su patrón.

En la Yegua Abanderada de Whiterun, encontrarás a Mallus Maccius que te explicará su plan: «Voy a ser breve porque tenemos mucho que hacer. El dueño de Honningbrew, Sabjorn, está a punto de celebrar una cata para el Capitán de la Guardia de Whiterun y vamos a envenenar el hidromiel». Cuando le preguntes si tiene el veneno, te dirá: «No, no. Esa es la gracia de todo el plan. Vamos a conseguir que Sabjorn nos lo dé. La hidromiel tiene un gran problema de plagas y toda la ciudad lo sabe. El veneno de las plagas y el hidromiel no se mezclan bien, ¿entiendes?» A continuación, le explicará dónde encaja usted: «Vas a pasar por aquí y echarle una mano al pobre Sabjorn. Él te va a dar el veneno para que lo uses en las plagas, pero tú también lo vas a verter en la cuba de elaboración». Cuando lo elogies por el inteligente plan, dirá: «Maven y yo pasamos semanas planeando esto. Lo único que necesitamos es que alguien como tú se ponga manos a la obra. Ahora ponte en marcha antes de que a Sabjorn le crezca el cerebro y contrate a otro para hacer el trabajo sucio». Luego se explayará: «Una vez que Sabjorn se haya quitado de en medio, Maven tiene planes para este lugar. De una forma u otra, no queremos que las plagas vuelvan. Considérenlo como más trabajo sucio. Yo hice mi parte metiéndolos ahí, ahora tú tienes que sacarlos». También te dirá por qué está haciendo esto: «Cometí el error de pedirle prestado dinero a Sabjorn. Me permite devolvérselo, ¡pero me hace trabajar hasta el cansancio! Me trata como un esclavo… Tengo que hacer todos los trabajos sucios y desagradables en la hidromiel». Luego le hablará de su propia recompensa: «Si este plan funciona, no sólo mi deuda desaparece, sino que estaré establecido de por vida. Maven y yo hemos llegado a un pequeño acuerdo. Si Sabjorn termina en la cárcel, ella se hará cargo de su hidromiel. ¿Y adivina quién va a dirigir la fábrica de hidromiel de Black-Briar en Whiterun? Lo estás viendo». Se despedirá con un recordatorio: «Recuerda que Sabjorn necesitará una ayuda. Haz que se vea bien».

De vuelta a la fábrica de hidromieles Honningbrew, Sabjorn estará en la taberna las 24 horas del día, esperando a que llegues. Parece que tiene un problema de alimañas, ya que se pueden encontrar dos skeevers muertos en el suelo junto a él. Cuando te acerques a él, te dirá: «¿Qué estás mirando? ¿No ves que tengo problemas aquí?». Si le preguntas por el problema, te explicará: «¿Me estás tomando el pelo? Mira este lugar. Se supone que estoy celebrando una degustación de la nueva reserva de Honningbrew para el capitán de la guardia. Si ve la hidromiel en este estado, me arruinará». Si te ofreces a ayudarlo, él responderá: «¿Ah sí? Y supongo que no lo harás por la bondad de tu corazón, ¿verdad? Espero que no esperes que te paguen hasta que el trabajo esté hecho». Habrá tres opciones:

«¿Qué estás mirando?»

Si logras persuadirlo o intimidarlo, continuará con: «Mi única exigencia es que estas alimañas sean eliminadas definitivamente antes de que mi reputación quede completamente destruida». Luego continuará, como si hubieras elegido la tercera opción: «He comprado veneno. Iba a hacer que mi perezoso e inútil ayudante Mallus se encargara de ello, pero parece haber desaparecido. Si plantas esto en el nido de las alimañas, debería impedir que vuelvan». Cuando aceptes la tarea te dirá: «No vuelvas hasta que todas esas cosas estén muertas». En este punto, habrá algunas opciones más. Puedes decirle que aún no has terminado el trabajo, y él dirá enfadado: «¿Por qué estás aquí entonces? Le he dicho al capitán de la guardia que tendremos la hidromiel despejada para la degustación y que podría llegar en cualquier momento». También compartirá, sin saberlo, cómo engañó a su ayudante: «Mallus es el mejor trato que he hecho nunca. Le presté un poco de oro hace un tiempo que sabía que nunca podría devolver. Nada como la mano de obra gratuita para abaratar los costes de explotación». Al salir de la conversación, añadirá: «Ahora tengo que limpiar este desastre», «Recuerda que no te pagan hasta que estén todos muertos» y «Por favor, date prisa. El capitán de la guardia no tiene paciencia cuando llega la hora de la cata».

Cuando hayas envenenado el nido y la cuba, vuelve junto a Sabjorn a la sala de la grifería y verás que el capitán de la guardia de la ciudad (el comandante Caius o Sinmir, según tu progreso en la guerra civil) está esperando la cata. Mallus Maccius también estará presente, esperando ansiosamente la caída de su tirano patrón, diciendo: «No puedo esperar a ver cómo se retuerce Sabjorn». Cuando le digas a Sabjorn que el trabajo está terminado, dirá ingratamente: «¡Ya era hora! Tuve que entretener al capitán hasta que terminaste». Sin embargo, no te entregará la recompensa antes de que termine la cata: «Tendrás que esperar hasta que el capitán haya terminado. Supongo que puedes esperar si es necesario». En este punto, puedes preguntarle sobre cómo es capaz de competir con la Meadery Black-Briar: «Maven Black-Briar se ha desvivido por intentar que cierre, pero afortunadamente tengo una buena relación con el Jarl de Whiterun. Cada año, vendo más Honningbrew y Maven pierde clientes. ¿Sabes por qué? Mi hidromiel sabe mejor». Cuando le insinúes que debe haber costado una fortuna, admitirá: «Bueno… sí. Quiero decir que todo el oro no ha salido de mí. Tengo un socio silencioso que me ayudó con las finanzas». Sin embargo, no pondrá nombre a su socio silencioso: «Silencioso significa que no lo cuento y que no es de tu incumbencia»

«Oh, vamos, esto es hidromiel… no un vino para ser sorbido y saboreado».

«¡He dicho que te muevas!»

Luego se dirigirá al Capitán y se desarrollará una escena:

Capitán: «Bueno, Sabjorn. Ahora que te has ocupado de tu pequeño problema de plagas, ¿qué tal si pruebo un poco de tu hidromiel?»
Sabjorn: «Sírvete, milord. Es mi mejor brebaje hasta ahora… Lo llamo «Reserva de cerveza de honor». Creo que le gustará a su paladar.»
Capitán: «Oh, vamos, esto es hidromiel… no un vino para ser bebido y saboreado.»

Después de servirse un poco de hidromiel envenenada, el capitán empezará a sentirse mal:

Capitán: «¡¿Por los Ocho?!/Huesos de Hor! ¿Qué… qué tiene esto?»
Sabjorn: «Yo… no lo sé. ¿Qué pasa?»
Capitán: «¡Me aseguraste que este lugar estaba limpio! ¡Me encargaré… de que permanezcas encadenado el resto de tus días!»
Sabjorn: «¡No, por favor! No entiendo…»
Capitán: «¡Silencio, idiota! Debería haber sabido mejor… confiar en este lugar después de haber sido acribillado por la suciedad.»
Sabjorn: «Te lo ruego… por favor. Esto no es lo que parece!»

El enfermizo capitán se acercará entonces a Mallus y le dirá: «Tú… tú estás a cargo aquí hasta que yo pueda resolver todo esto». Mientras Mallus acepta la responsabilidad, se dirigirá de nuevo a Sabjorn: «Y tú… vendrás conmigo a Dragonsreach. Veremos lo rápido que se aclara tu memoria en las prisiones de la ciudad. Ahora muévete». Sabjorn tratará entonces de defenderse, diciendo: «¡Mira, te aseguro que todo esto es un gran malentendido!» El capitán entonces sacará su arma y gritará: «¡He dicho que te muevas!» Mientras un triste Sabjorn es arrastrado fuera de su propio local, Mallus no puede resistirse a comentar: «Adiós, Sabjorn».

Un confundido Sabjorn se encontrará entonces en las mazmorras de Dragonsreach, sin saber del enorme plan montado contra él. Cuando le digas a Mallus que necesitas mirar los libros de Sabjorn, te entregará una llave y dirá: «Así que Maven quiere dar caza al socio privado de Sabjorn, ¿eh? Eres bienvenido a echar un vistazo a la oficina de Sabjorn. Tiene la mayoría de sus papeles escondidos en su escritorio». En los aposentos privados de Sabjorn, no sólo encontrarás una carta de Maven a Sabjorn, sino también otra pista sobre la persona que quiere acabar con Maven y el Gremio de Ladrones. De vuelta a Riften, Maven Black-Briar deja claro que esperaba más información sobre Sabjorn. Cuando le entregues el pagaré, comentará: «Esto no me dice mucho. Lo único que podría identificar al socio de Sabjorn es este pequeño y extraño símbolo». En el Gremio de Ladrones, Brynjolf comentará tu esfuerzo: «Se dice que el pobre Sabjorn se ha encontrado en la prisión de Whiterun. Qué mala suerte para él». Cuando le cuentes lo de la carta firmada con un extraño símbolo, el mismo que se encuentra dentro de la finca Goldenglow, dirá «Entonces esto es más que una coincidencia. Primero Aringoth y ahora Sabjorn. Alguien está intentando acabar con nosotros abriendo una brecha entre Maven y el Gremio».

Mientras la trama se complica en el Gremio, Sabjorn pasará el resto de sus días entre rejas en la mazmorra de Dragonsreach. Si te acercas a él, te insinuará que ha descubierto a la persona que está detrás de su caída: «Fuiste tú, ¿verdad? Debería haberlo sabido. Ahora mírame» y «Has enviado a un inocente a la cárcel. Espero que estés orgulloso de ti mismo». También comentará con rabia: «Al diablo con Maven. Un día, ella tendrá lo suyo. Puedo prometerle eso» y «Déjeme en paz. ¿No has hecho ya suficiente daño?»