Amar de verdad a alguien significa permitirle que te vea en tu estado más vulnerable y estar completamente de acuerdo con ello. Estoy seguro de que leer esa frase puede causar cierta aprensión y el pensamiento puede ser absolutamente petrificante. El amor puede ser algo aterrador, pero no siempre.
El amor puede ser imprevisible, en un momento todo puede ir de maravilla y al siguiente el amor puede tenerte tumbado boca abajo sin saber qué te ha golpeado. Todos hemos pasado por algún tipo de desamor que te hace preguntarte si el amor vale la pena, pero el verdadero amor vale todo lo que has pasado.
Siempre habrá algún tipo de preocupación ligada al amor, porque en el fondo todo el mundo busca lo mismo. Alguien que haga que su día sea mejor, alguien que vea todo lo que odias de ti mismo y vaya a amarlo todo. La esperanza de encontrar a alguien que se esfuerce tanto como tú, que tenga la capacidad de quererte como tú le quieres.
No dejes que una persona te arruine o convierta tu corazón en piedra. No intentes ver lo malo en algo bueno, abrázalo y no alejes a esa persona. No dejes que los miedos de los «¿y si…?» o «¿podría haber sido…?» te impidan encontrar la felicidad.
Tienes que creer que te mereces el tipo de amor del que oyes hablar y no me refiero sólo al tipo de amor que emula Hollywood o que las redes sociales te hacen tragar. Hablo del amor que te hace sentir más cómodo, que cura el peor dolor por el que has pasado y te pone una sonrisa en la cara cuando piensas en el futuro.
El desamor tiene el poder de convertir a una persona que una vez abrazó la idea del amor y convencerla de que ponga barrotes alrededor de su corazón. No lo hagas, no encierres tu corazón con tantos candados que ni tú mismo puedas averiguar cómo liberarte.
El miedo puede arruinar a una persona. Puede arruinar absolutamente todas las posibilidades que tienes en la vida de hacer algo. No dejes que ese miedo aleje el amor para siempre.
Te prometo que eres querible, y que un día encontrarás a la persona que haga que todo tenga sentido. El amor nunca va a desaparecer, así que no tiene sentido que te cierres a él.
Un día te alegrarás tanto de haberle dado a esa persona tu número de teléfono, que te llevó a decir que sí a esa segunda cita. Puede que no sea esa persona, pero con el tiempo empezarás a sentir lo que es el amor de verdad y un día vas a decirle a alguien con valentía que le quieres y no tendrás que preocuparte ni angustiarte porque te van a decir que también te quieren.
Vas a encontrar ese amor que con tanto gusto has dado a los demás, y vas a recibir el amor que te mereces. Será todo lo que podrías soñar y mucho más.
Sí, el amor puede ser arriesgado, pero todo lo que vale la pena tener en la vida a veces requiere que te arriesgues. No siempre acertarás, pero cuando encuentres a la persona adecuada cuyo corazón hable al tuyo de una forma que nunca creíste posible, agradecerás haberte arriesgado en el amor.
El riesgo merecerá la pena cuando encuentres a la persona sin la que no puedes imaginarte la vida. Tómate tu tiempo y no te apresures en estas cosas pero sólo recuerda que una vez que encuentres a tu persona, estarás agradecido porque el amor realmente vale todos los riesgos.
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