Resumen
PIP: Esta discusión sobre el adolescente sexualmente activo proporciona un análisis estadístico de los comportamientos sexuales y revisa las cuestiones de desarrollo, el uso de anticonceptivos, el embarazo adolescente y sus problemas asociados, y la educación sexual. En las últimas dos décadas se han producido importantes cambios en las costumbres sexuales, la tecnología anticonceptiva, la aceptación de las familias monoparentales y la disponibilidad del aborto inducido. En los Estados Unidos, el embarazo en la adolescencia y las enfermedades venéreas epidémicas se han convertido en importantes problemas de salud infantil. Es importante que el pediatra, el médico de familia, la enfermera y el profesional de la salud mental conozcan la magnitud de estos problemas y sus posibles áreas de intervención. Diversos estudios epidemiológicos sobre el comportamiento sexual han documentado un aumento del número de adolescentes sexualmente activos en la última década. En una encuesta de adolescentes metropolitanos, Zelnik y Kantner encontraron que la actividad sexual declarada entre las adolescentes de 15 a 19 años aumentó del 30% en 1971 al 50% en 1979. Entre las adolescentes blancas nunca casadas de este grupo de edad, las estadísticas de 1971 indicaban que el 23% tenía experiencia sexual, y esta incidencia aumentó al 42% en 1979. Se sabe mucho menos sobre el comportamiento sexual de los adolescentes más jóvenes en el rango de 11 a 14 años. El aumento del número de adolescentes que mantienen relaciones prematrimoniales, junto con el adelanto de la edad de la menarquia y el retraso del matrimonio, ha aumentado el riesgo de embarazos prematrimoniales. El número de adolescentes de 15 a 19 años que experimentan un embarazo prematrimonial ha aumentado significativamente, pasando del 8,5% en 1971 al 16,2% en 1979, y el aumento más notable se ha producido entre las adolescentes blancas. Entre las adolescentes de 15 a 19 años con experiencia sexual, el 32,5% ha experimentado un embarazo prematrimonial. El comportamiento sexual entre los jóvenes adolescentes está influenciado por varias variables, incluyendo la maduración, los valores personales sobre el sexo prematrimonial, la inclinación y la oportunidad. Existe una tendencia creciente a que los adolescentes consideren el comportamiento sexual como una cuestión de elección personal más que como una cuestión de moralidad. Los adolescentes en todas las etapas de desarrollo pueden retrasar la obtención de métodos anticonceptivos adecuados. La negación de la fertilidad es un tema común tanto en la adolescencia temprana como en la tardía. La constancia y la responsabilidad necesarias para el uso de anticonceptivos eficaces no siempre son compatibles con la etapa de desarrollo de los adolescentes en la que han elegido ser sexualmente activos. El uso de anticonceptivos eficaces suele estar relacionado con el aumento de la actividad sexual, el aumento de la cercanía de una relación, un susto de embarazo debido a un retraso o ausencia de la menstruación, la influencia positiva de amigos y familiares o de los médicos, y/o el descubrimiento real de un programa anticonceptivo. Para las adolescentes, el acceso a los anticonceptivos ha sido problemático y los anticonceptivos recetados se interrumpen con frecuencia al continuar la actividad sexual. Los sentimientos de desesperación, inutilidad y fracaso escolar crónico parecen ser factores comunes entre las adolescentes que deciden llevar a término un embarazo. Los cursos de educación sexual deberían facilitar la toma de decisiones sobre un comportamiento sexual responsable.