Enclavada entre dos edificios de ladrillo y mortero en el North End de Boston se encuentra la famosa «casa flaca» de la ciudad, una estructura construida a base de traición y despecho.
La casa de 1.166 pies cuadrados en el número 44 de Hull Street se vendió en mayo a un comprador anónimo por 900.000 dólares. El nuevo residente vive ahora en un pedazo de la historia de Boston, aunque estrecho y no ideal para demasiada compañía.
Se dice que la propiedad perteneció a dos hermanos que heredaron tierras de su padre en el siglo XIX. Sin embargo, cuando uno de los hermanos estaba lejos luchando en la Guerra Civil, el otro hermano construyó una gran casa en la propiedad, ocupando más que su parte de terreno. Cuando el otro hermano regresó y encontró su parte de la tierra invadida, por despecho, decidió meter una casa adyacente, bloqueando las vistas y la luz del sol de este hermano.
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La «casa del despecho» no tiene puerta principal. Los huéspedes entran en la casa a través de una puerta lateral que se asemeja a una ventana.
Tiene cuatro pisos de menos de 300 pies cuadrados cada uno. Tiene todas las comodidades de una casa normal, pero mucho, mucho más compacta. La mayoría de los muebles no caben en el edificio debido al diminuto espacio asignado entre las paredes y las escaleras.
Sin embargo, esta casa única tiene mucho en poco espacio. Todos los muebles y las necesidades del hogar encajan perfectamente en los rincones y grietas de la Skinny House.
Tiene un patio trasero sorprendentemente espacioso para una vivienda del North End, y la cubierta de la azotea muestra algunas grandes vistas.
NBC Boston hizo un recorrido por esta vivienda histórica con un representante del comprador anónimo para que puedas ver esta encantadora atracción por ti mismo.