Oscar Arias Sánchez se ganó el respeto de líderes y humanitarios de todo el mundo por llevar la paz a Centroamérica. Nacido en 1940, estudió en Estados Unidos y luego se licenció en Derecho en Costa Rica.
Elegido Presidente de Costa Rica en 1986, Arias Sánchez puso inmediatamente en conocimiento del mundo su intención de restablecer la paz en Centroamérica desvinculando a la región de la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética. En una serie de reuniones con los presidentes de Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua, el Presidente Arias Sánchez presionó para que se resolviera la agitación y se pusiera fin a la influencia exterior en Centroamérica. Finalmente consiguió que se aprobara su plan de paz, que exigía que cada país limitara el tamaño de sus ejércitos, garantizara la libertad de prensa y celebrara elecciones libres y abiertas. El plan tuvo éxito y, con la firma de los acuerdos, los combates en la región llegaron a su fin.
En 1987, el presidente Oscar Arias Sánchez recibió el Premio Nobel de la Paz por traer la paz a la región, y utilizó el premio monetario para establecer la Fundación Arias para la Paz y el Progreso Humano. Durante su presidencia, se aventuró con frecuencia a salir al público sin comitiva ni fanfarria para escuchar las preocupaciones de la ciudadanía. Tras la conclusión de su primer mandato, siguió siendo un «hombre del pueblo», promoviendo la seguridad humana y el desarrollo en muchos frentes. En 2006, fue elegido de nuevo Presidente de Costa Rica y hoy sigue defendiendo la paz y los derechos humanos.