No siempre es fácil saber cómo dar con una idea para una canción, sobre todo si esperas a que te llegue la inspiración. Por desgracia, eso no ocurrirá tan a menudo como deseas. Por eso, lo mejor es estar siempre activo y buscar nuevas ideas para tu próxima canción. Eso es lo que vamos a tratar aquí.
Ideas líricas: están por todas partes
Cuando quieras buscar ideas líricas, descubrirás que, a menudo, no están lejos. De hecho, pueden estar a tu alrededor. Aquí tienes un par de formas de encontrarlas.
Busca títulos de libros o películas – A menudo, estos títulos pueden crear ideas para una historia. Incluso un título que se te ocurra en la cabeza puede ser un excelente punto de partida.
Historias de películas o del mundo real – Todos hemos visto una o dos películas. Ponte en la piel de un personaje de una película que hayas visto recientemente. ¿Qué pasará con la vida de este personaje después de que la película haya terminado? ¿La feliz pareja caminará siempre en el aire, o algo los separará? Ya conoces los detalles de sus vidas, así que ¿por qué no hacer una historia sobre eso?
¿Escuchaste accidentalmente una conversación entre dos personas, o alguien te contó algo que le ha pasado a él o a alguien que conoce? ¿Podría haber material para una canción si cambiaras un poco la historia? (No querrás tener problemas con tus amigos.)
Mira las noticias – ¿Hay alguna historia que te haga sentir algo especial? Tal vez te moleste, te alegre o te deje con un montón de preguntas. Toma nota de las cosas que podrían acabar en una letra.
Qué ha pasado hoy en tu propia vida – ¿Ha sido un día normal? ¿Estabas cansado después del trabajo y querías salir de la «carrera de ratas»? ¿O has visto a la chica/chico de tus sueños? Aunque no lo pensemos, muchas cosas que nos rodean pueden convertirse en la letra perfecta para una canción.
Escribir objetos
La escritura de objetos es un ejercicio que, a la larga, puede ayudarte a escribir más fácilmente las letras de las canciones y a idear historias. Este ejercicio puede y debe hacerse todos los días durante 10 minutos, así que pon tu temporizador. Es algo que leí en «Writing Better Lyrics» de Pat Pattison. Así es como funciona.
Elige un objeto y concentra todos tus sentidos en él. Digamos que eliges un vaso de agua. Siéntate con un bolígrafo y un papel y, sin parar, responde a preguntas como:
- ¿Cómo huele el agua?
- Si bebieras el agua, ¿a qué sabría?
- ¿El agua parece limpia cuando la miras de cerca?
- ¿Qué sonidos oyes? ¿Una vieja radio de fondo?
- ¿Qué sentirías al verter el agua sobre tu cabeza?
- También se te anima a que cambies tu atención a otras cosas. En este caso, podrías escribir sobre el aspecto de la radio. ¿Qué puedes decir sobre los mandos de la radio que te permiten bajar el volumen? Cuando miras al exterior, ¿ves los charcos que se han formado en la calle debido a la lluvia?
Del mismo modo, involucra todos tus sentidos en la composición de tus canciones. Nunca se sabe; cuando vuelvas a ver todo lo que has escrito, puede que encuentres una idea o un par de líneas para tu próxima canción.
Haz una lluvia de ideas para la letra de tu canción
Ya tienes una idea de lo que trata la canción. Ahora es el momento de hacer una lluvia de ideas para toda la canción. Siéntate durante un par de minutos y acepta todo lo que se te ocurra relacionado con tu tema. Escríbelo todo, incluso las frases cliché. Puedes editarlas más tarde.
Cuando hayas terminado, busca todas las líneas que creas que pueden encajar en la canción. Edita las palabras y frases que ya se han dicho demasiadas veces en las canciones, e intenta encontrar algo más singular. Guárdalas en tu borrador si son relevantes para el resto de la canción.
Planifica tu canción – tienes una historia que contar
Con las líneas que tienes hasta ahora, es hora de planificar tu canción. ¿Qué quieres decir en la primera estrofa? Cómo puede avanzar la historia en la segunda estrofa? Cada nueva estrofa debe decir algo nuevo; no repitas lo mismo utilizando diferentes palabras.
En el estribillo, debes presentar la idea principal y el título de la canción. Di lo que quieres decir. Esta parte no debería tener demasiadas palabras y mensajes.
Ideas para la melodía
A estas alturas, la canción debería tener su estructura. Ya sabes cómo avanza la canción líricamente, y el estribillo presenta el punto de la canción.
Trata de rellenar los huecos donde te faltan líneas líricas. Toca tu instrumento, encuentra dos o tres motivos -frases musicales cortas- en las estrofas, y comprueba si te vienen las palabras.
Como la canción contiene frases acabadas, puedes aprovechar para decidir dónde quieres rimar. Sigue el mismo patrón en todas las estrofas y da a los oyentes lo que esperan. Un ejemplo podría ser rimar sólo las líneas 3 y 4 o las líneas 2 y 4. Asegúrate de mantener el mismo esquema de rima en todos los versos.
Puedes correr el riesgo de quedar insatisfecho con lo que tienes hasta ahora. Esto es sólo el proceso de escribir canciones; encontrarás nuevos y mejores métodos a lo largo del camino.
Encuentra tu método
Este artículo trataba de intentar encontrar nuevas ideas para una canción o para curar el bloqueo del escritor. Por supuesto, este proceso se puede hacer de muchas maneras. A algunas personas les gusta tocar un instrumento mientras se les ocurre una idea y se centran sólo en la melodía primero. Algunas personas prefieren hacerlo al revés.
En este artículo, empezamos con la letra para encontrar la idea de toda la canción y conseguir algo de estructura. Después, se trata de encontrar una melodía y rellenar los huecos, para luego editar tanto la letra como la melodía cuando sea necesario.
Espero que estos consejos te resulten útiles. Quizá ya tengas la primera idea para tu próxima canción.
Si es así, quizá quieras leer sobre cómo estructurar tu próxima canción aquí.