Después de que el periodo de cortejo y de noviazgo haya terminado y hayan pasado los años, lo más probable es que hayas agotado todos los temas de los que tienes que hablar con tu pareja.
Si lleváis tanto tiempo juntos, en cierto modo sientes que lo sabes todo sobre tu novio. Por eso, cuando se te acaban los temas, empiezas a preguntarte si las cosas en tu relación han llegado a un punto de estancamiento.
La verdad es que estas cosas ocurren y habrá momentos en los que tú y tu pareja se queden naturalmente sin cosas de las que hablar. En una relación de larga duración, es fácil instalarse en la rutina de hacer cosas juntos.
Pero no te preocupes, si estás intentando devolverle la chispa a tu relación, tenemos algunos temas de conversación con los que puedes empezar para no tener que estar siempre en silencio.
«¿Qué es lo que más te apasiona en la vida y nadie más conoce?»
¿Crees que lo sabes todo sobre tu pareja? ¡Podrías estar equivocado! Hacer una pregunta como ésta podría abrir un lado de tu hombre que probablemente no has visto. Incluso si no tiene una pasión en particular, es probable que tenga sueños o una aspiración que lo motive.
Lo más importante que debes hacer al tener estas conversaciones es escuchar sin juzgar, sin importar que sus sueños, pasión o aspiraciones no se relacionen contigo.
Abrirse puede ser una experiencia desalentadora, por lo que es muy importante hacer que la otra parte se sienta escuchada y apreciada por lo que está compartiendo.
«¿Cuál es tu recuerdo favorito de la infancia?»
Esta pregunta es abierta y podrías hacer un montón de preguntas de seguimiento una vez contestada. También podrías compartir una parte de ti que él podría desconocer y es una forma estupenda de conectar con alguien.
Aunque las respuestas de cada uno serán diferentes, podemos garantizar que cualquier recuerdo que tu pareja comparta contigo te dará una mejor visión de quiénes son como personas y de cómo su infancia y educación les han influido a medida que crecían.
«¿Cuál ha sido la experiencia sexual más incómoda que has tenido?»
Esta pregunta funciona mejor si ambos están muy seguros en su relación y han establecido que está bien hablar de relaciones pasadas. Lo bueno de una pregunta como ésta es que abre un portal a aún más preguntas.
También te encantará la mirada de vergüenza (y tal vez incluso de horror) cuando tu pareja comparta su historia contigo. Será muy divertido.
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«¿Cómo puedo ser una mejor pareja para ti?»
Compartir opiniones y estar abierta a preguntas como ésta podría fortalecer tu relación y acercarte a tu novio. Una vez que él haya terminado de compartir, tú también podrías compartir sobre cómo podría ser una mejor pareja para ti.
Por último, también podrías hacer de las sesiones de intercambio como esta una conversación básica que ocurra cada pocos meses.
«¿Cuáles son algunos de tus mejores recuerdos que involucran a X, Y, Z?»
Entonces, puede que conozcas a sus mejores amigos y a los miembros de su familia pero… ¿realmente sabes por qué se lleva tan bien con estas personas tan significativas en su vida? Si no es así, ¡pregúntale!
Te garantizamos que tiene algunas anécdotas divertidas bajo la manga sobre estas personas y lo más probable es que también sean momentos reconfortantes. ¡
Incluso si tu novio no es del tipo más sentimental, a la gente le encanta hablar de sí mismos y a veces todo lo que se necesita es hacer las preguntas correctas con el fin de conseguir que se abran.
«¿Cuáles son algunas de las cosas que hago todo el tiempo que son atractivas o sexy para ti?»
Hacer una pregunta como esta significa que se llega a saber más acerca de lo que le gusta yddd usted recibe un cumplido! Es como matar dos pájaros de un tiro.
Sus respuestas a esto podrían ser cosas mundanas como… cómo te frotas la nariz cuando estornudas o incluso cómo roncas un poco cuando te quedas a dormir, pero, realmente muestra lo mucho que se da cuenta de las pequeñas cosas que haces y esto podría darte una idea de por qué está tan enamorado de ti.
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«¿Qué fecha/recuerdo de nuestros primeros años de relación es el más memorable para ti?»
¡Ah, recordar la fase inicial de vuestra relación puede ser bastante romántico! Los dos podríais recrear el momento en vuestra próxima cita.
Lo bueno es que esta pregunta os hace hablar del pasado y podría recordaros los momentos más dulces que habéis compartido el uno con el otro. Quién sabe, ¡puede que incluso refuerce vuestro vínculo después de reflexionar sobre el pasado!
«¿Cuándo supiste que estabas enamorada de mí?»
¡Esta pregunta te golpeará en los sentimientos! Su respuesta podría sorprenderte también y podría abrir un montón de oportunidades para hacer otras preguntas. También podríais compartir el momento en el que supisteis que estabais enamorados.
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«Cuéntame los momentos de mayor orgullo en tu carrera.»
Algunas personas tienden a definir su nivel de éxito basándose en sus carreras, y si tu hombre es una de esas personas, considera preguntarle sobre sus momentos más orgullosos en el trabajo.
Estamos seguros de que tiene algunos, incluso si no los tiene, la pregunta le hará pensar. Os acercará a los dos y obtendrás una gran visión de la forma de pensar de tu hombre y de qué es lo que le hace sentir bien en el trabajo.
No lo pienses demasiado y pregúntale cualquier cosa
Honestamente, pregunta lo que se te ocurra.
Estar en una relación a largo plazo significa que probablemente has alcanzado un nivel de comodidad que es completamente incomparable a cualquier otra relación en la que hayas estado, así que a menos que tus preguntas sean insensibles o estén fuera de lugar, creemos que casi no hay nada de malo en hacer la pregunta más aleatoria que se te ocurra.
Lo más importante a tener en cuenta es que, si vas a hacer preguntas profundas sobre la carrera, el pasado o los amigos más cercanos y la familia de tu hombre, estate abierta a las respuestas que pueda dar y sé inquisitiva y haz preguntas de seguimiento.
Cuando sea apropiado, intenta relacionarlo con cualquier experiencia que puedas tener también. Si lo hace, podrá mantener la conversación y descubrir una faceta de su pareja que quizá no conocía.
Este artículo se publicó por primera vez en CLEO Singapur.